Yo
sólo iría contigo al aeropuerto para coger un avión y llegar a una playa
perdida... y comernos a besos... hasta que me olvide de qué día es y me vuelva
loca de tanto quererte… (Sara)
Te regalaría una bola del mundo para jugar contigo a cerrar los ojos y hacerla girar y señalar los sitios donde podríamos ir juntos... ¿Sabes la cantidad de lugares donde podríamos ser felices tu y yo? (Sara)
Nos empeñamos en buscar la felicidad cada día y no nos damos
cuenta de que es ella quien tiene que encontrarnos .Y eso será donde menos te
lo esperas; en el instituto, en el supermercado, en mitad de una huida. Y
cuando llega descubres que ahí no acaba todo. Que el final de un camino, sólo
es el principio de otro y lo único importante es la persona que escoges para
que camine a tu lado. Y esconderse es lo que menos te importa. Lo que te
importa es que estás tocando con la yema de los dedos eso que has estado
soñando toda tu vida; y ya solo importa el hoy, el presente, y lo que queda por
venir. (Sara)
La
única razón que tengo para seguir luchando eres tú. (Lucas)
Si tú saltas, yo salto. Si a ti te disparan yo sangro.
Y si tú te quemas yo ardo. (Sara)
Nadie me puede dar lo que tú me das, nadie. (Lucas)
A veces me preguntaba cómo serían las cosas cuando yo no
estuviese aquí, y me costaba imaginármelo. Supongo que todos nos creemos
demasiado importantes, nos parece que nuestra casa ya no puede ser la misma si
no estamos para sentarnos en nuestro sillón, que el bar donde desayunamos ya no
puede ser el mismo si no estamos ahí para poder mojar el churrito en el café.
Pensamos que cuando morimos la vida se va a detener, que va a hacer un alto
para digerir que ya no estamos, pero no es verdad… el mundo no se para… y sigue
su marcha sin nosotros y lo único que cambia es el tamaño de tu nueva casa, una
caja de 1’80 de largo y medio metro de ancho, a 12 palmos de profundidad donde
la humedad y las lombrices son tu única compañía. (Lucas)
¿Sabes
por qué a la gente le gusta estar enamorada? Porque cuando estás enamorado, te
sientes vivo, y eres... como un niño. Y a todo
el mundo le gusta ser un niño. (Sara)
La única razón que tengo para seguir luchando eres tú. (Lucas)
Aunque pasen mil años yo siempre voy a estar esperándote, siempre, porque no hay nadie en este mundo que te quiera tanto como yo. (Sara)
Ya
solo pienso en las horas que faltan para verte, porque
ya solo pienso en ti. (Sara)
Lo siento, siento que hayas tenido que ver la mierda que ahí afuera, pero… si te pasa algo Sara, si te llega a disparar… si no llego a tiempo... yo me muero. (Lucas)
Me besaste Lucas, no pudiste evitarlo, porque me quieres… (Sara)
Lucas
yo voy a estar toda mi vida esperándote, día tras día, porque sé que antes o
después te enamoraras de mí. Y voy a estar esperándote siempre, siempre... (Sara)
La vida no se mide por las veces que respiras, sino por los momentos que te dejan sin aliento. (Lucas)
- Sara: ¿Parece que va a llover significa que me quieres?, ¿me lo dirás cada día?
- Lucas: Cada día...
Lucas: Paco,
¿sabes por qué estaba besando a Sara?... Porque la quiero.
-
Sara: Lucas
si me quieres dime que no me quieres.
-
Lucas: No
te quiero.
-
Sara: Lucas
si me quieres dime que nunca estaremos juntos.
-
Lucas: Nunca
estaremos juntos.
-
Sara: Si
me quieres dime que soy una cría.
-
Lucas: Eres
una cría.
-
Sara: Te
quiero, te quiero, te quiero, te quiero Lucas, te quiero.
- Sara: ¿Me llevas al cole hoy?
- Lucas: Te voy a comprar un despertador, Sara.
- Sara: Me lo pondré debajo de la almohada, o mejor,¿ por qué no vienes a despertarme tú por las mañanas?
- Lucas: Mejor el despertador.
- Sara: Sí, porque lo de que vieneses tú... a mí me echarían del colegio por falta continuada y a ti te echarían de la comisaría.
-
Lucas: Parece
que va a llover...
-
Sara: ¿Parece
que va a llover significa te quiero?
-
Lucas: Sí.
-
Sara: Es
algo así como... ¿un código secreto?
-
Lucas: Sí.
-
Sara: ¿Y
me lo dirás cada día?
-
Lucas: Cada
día.
-
Sara: ¿Me
quieres?
-
Lucas:
No.
-
Sara: ¿Piensas
que soy guapa?
-
Lucas:
No.
-
Sara: ¿Me
tienes en tu corazón?
-
Lucas:
No.
-
Sara: ¿Si
me fuera llorarías por mí?
- Lucas:
No. No te quiero, te amo. No pienso que eres guapa, pienso que eres hermosa. No estás en mi corazón, eres mi corazón. No lloraría por ti, moriría por ti.
¿Sabes? Ya sé por qué
te quiero. Te quiero porque eres “casa”, da igual lo que pase ahí fuera, porque
juntos somos casa y todo está en paz. Vienes aquí y te duermes en mis brazos y
yo me quedo toda la noche mirándote porque es lo más bonito que puedo hacer, tú
eres mi casa y yo soy tu casa. Te quiero. (Sara)
¿Sabes?
Yo también sé por qué te quiero, porque haces las cosas fáciles, y si tuviera
que elegir un sitio para vivir sería tu cuarto. Debajo de tu cama el mundo es
tan pequeño que parece que no puede pasar nada más, y a mí no me hace falta que
pase nada más, si estoy contigo. Te quiero. (Lucas)
En
la vida no eliges a tu padre, ni a tu madre, ni a tus hermanos, no eliges el
país donde vives, tu nombre, ni el color de tus ojos. Hay una cosa que eliges tú solo: a tus amigos. Yo, me he coronado
eligiendo a los míos. (Lucas)
Lucas: Sara, no digas nada, abrázame, solo abrázame por
favor, solo necesito eso. Necesito sentir que estás a mi lado, quiero sentir
que me arropas con tu calor, sólo quiero un abrazo tuyo para tener algún motivo
por el que seguir luchando. Estoy desolado y sólo quiero tenerte a ti cerca, no
quiero ver a nadie, no quiero hablar con nadie que no seas tú, solos tú, yo, y
mi dolor.
Sara: No
Lucas, solos tú, yo, y nuestro dolor, es y será de los dos. Si tu sufres yo
sufro, si tu lloras yo lloro, te amo ¿recuerdas? Eso significa que tus
problemas ahora se han convertido también en los míos, no te dejaré solo,
estaré a tu lado en todo momento aunque tú no lo quieras, te daré todos los
abrazos que necesites, y todo el calor que tu corazón pida, yo, siempre estaré
a tu lado.
Librarse
del miedo es como quitarse la ropa delante de alguien: A veces cuesta, pero
cuando empiezas lo único que tienes que hacer es seguir. Sin dudar. Y de
repente te das cuenta de que el miedo ya no te pertenece... ha desaparecido.
Como esa ropa que un día dejas de usar. (Sara)
-
Sara:
Dentro de un año cumplo los 18.
-
Lucas:
Dentro de un año, dos meses, y seis días.
- Sara: Bueno
y cuando cumpla los 18, ¿qué? Seguiremos aquí en San Antonio y mi padre seguirá
siendo mi padre y seguirá queriendo matarte si me pones una mano encima.
-
Lucas:
Eso no va a ser siempre así.
-
Sara: ¿Me
estás pidiendo que te espere? Pídemelo.
-
Sara: No
soportas que te quiera, no soportas que te odie. Tú dirás.
-
Lucas: Prefiero
que me quieras.
-
Sara: La
verdad es que tampoco te odio tanto, solo un poquito.
-
Lucas: Yo
tampoco te quiero tanto, solo un poquito.
-
Sara: Vamos
a intentarlo otra vez por favor.
-
Lucas: Por
favor, por favor.
-
Sara: ¿Estarás
siempre ahí?
-
Lucas: Siempre
mi vida. Para siempre, mi amor.
-
Sara: Solo
una cosa.
-
Lucas: ¿Sí?
-
Sara: No
quiero contárselo a nadie.
-
Lucas: Claro
que no.
-
Sara: Ni
a mis padres, ni a mi abuelo…
-
Lucas: Si,
a tu abuelo…
-
Sara: A
nadie. No quiero más gente opinando. Solos tú y yo.
-
Lucas: Solos
tú y yo. Solos, mi niña.
Lucas: En
el interrogatorio como me declaro ¿inocente o culpable?
Sara: Di
la verdad declárate enamorado.